27/09/2019

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En el marco de la asignatura de Historia, el alumnado de 4at de ESO y 2.º de Bachillerato ha conocido las circunstancias de las personas fusiladas durante el franquismo

Estudiantes de los IES Bovalar y Caminàs han visitado esta mañana los trabajos para la exhumación de personas fusiladas durante el franquismo que la Concejalía de Memoria Histórica lleva cabo en el cementerio civil. Acompañados por el director de las excavaciones, Miguel Mezquida; el profesorado de Historia de los centros, y por Maribel Peris y Juan Luis, Porcar, miembros del Grup per la Recerca de la Memòria Històrica de Castelló, el alumnado ha profundizado en este capítulo del pasado reciente de la ciudad.

Los grupos participantes pertenecen a los cursos de 4º de ESO y 2º de Bachillerato, niveles en los que se trata curricularmente la Guerra Civil Española, el franquismo y la represión. Los y las jóvenes se han interesado por los detalles que rodearon el asesinato de las personas en la recuperación de los cuerpos del cuales trabaja el equipo de arqueólogos. El concejal de Educación, Francesc Mezquita, ha querido estar presente durante las visitas, en las que ha participado durante esta semana también el IES Sos Baynat.

Así pues, durante la próxima semana los tres institutos continuarán las visitas a los trabajos de exhumación, que finalizarán a principios del mes de octubre y que tienen como objetivo identifica ocho hombres fusilados durante la primavera de 1940. A consecuencia de la disposición de los cuerpos, está previsto exhumar a una quincena personas, cuyos los restos serán analizados y sometidos a pruebas antropológicas y genéticas.

El proyecto supondrá la apertura de cinco puntos de las fosas comunes del cementerio civil, en los que, según el registro que se conserva, están enterrados Bautista Peris Muñoz, Miguel Tormos Adsuara, Joaquín Jaques Celma, Ernesto Centelles Roig, José Aragón Ucher, Joaquín Fresquet Rueda, Agustín Barceló Pitarch y Vicente Ballester Forcada. Los expertos consideran que los primeros restos encontrados pertenecen a este último y el cuerpo ya ha sido trasladado a la Universidad Autónoma de Madrid para ser estudiado.