12/02/2018

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La alcaldesa de Castellón expone los logros del "gobierno del cambio" en una conferencia en el Fórum Europa.

La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha desgranado las políticas sociales, económicas, ambientales, culturales, de transparencia y participación ciudadana desarrolladas por el Gobierno municipal en los últimos dos años y medio. "Castellón es un ciudad de oportunidades en la que merece la pena invertir", ha señalado. Marco ha intervenido hoy en la tribuna del Fórum Europa, en Valencia. La presentación ha corrido de la mano de la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador.

Marco ha aprovechado para renovar las exigencias en infraestructuras y financiación ante el resto de administraciones: "Hemos sido claros a la hora de reivindicar lo que es justo. No queremos ser más, pero tampoco queremos ser menos y por eso han sido incesantes nuestras peticiones al resto de instituciones, indistintamente del color político". En lo que respecta a la deuda de la Generalitat en inversiones y gasto corriente, se ha reducido al mínimo.

Pero ha hecho bandera de nuevas reivindicaciones, como las ferroviarias: "Vuelvo a hacer un llamamiento a todas las administraciones públicas, pero sobre todo al Gobierno de España, para que sea consciente de la relevancia estratégica del Corredor Mediterráneo para Castellón y para la Comunidad Valenciana. Debe trabajar para que sea una realidad cuanto antes, es una reivindicación justa y le insto a ponerse a trabajar ya para que sea una realidad cuanto antes". La estación intermodal de mercancías, una infraestructura esencial, en cambio, está más cerca de ser una realidad.

"Castellón sigue siendo una ciudad con una deficiente comunicación ferroviaria y el caos de Cercanías es inadmisible en pleno siglo XXI. Desde el primer momento avisamos de que el tercer hilo no era la solución y la puesta en marcha del falso AVE por parte del presidente Rajoy hizo que todo el mundo se diera cuenta de lo que miles de usuarios sufren a diario", ha añadido.

En lo referente a la financiación, ha abogado por impulsar cambios en el sistema, de manera que contemple la realidad de los ayuntamientos. "El Gobierno central debe abordar de modo inmediato la reforma y adecuación de la regla de gasto y fijar criterios razonables de estabilidad presupuestaria". En ese sentido, ha exigido que se permita a las entidades locales que puedan destinar el superávit para promover programas y servicios que demanda la ciudadanía en políticas sociales, empleo, igualdad y juventud, entre otros.

Amparo Marco ha destacado las oportunidades que ofrecerá el nuevo Plan General, ahora en la fase de exposición pública, que "huye del urbanismo de cemento y apuesta por el urbanismo verde, por el urbanismo sostenible frente al urbanismo especulador". "Estamos ante el mayor reto de la legislatura y de las siguientes: transformar la ciudad, mejorar la calidad de vida de los castellonenses y ofrecer una seguridad jurídica que genere oportunidades". Un Plan General que, ha añadido, devuelve espacios a la ciudadanía, incorpora la perspectiva de género y apuesta por la movilidad sostenible.

Marco ha expuesto las claves de la gestión municipal para "convertir el Ayuntamiento en motor para reactivar la economía y ayudar al sector privado a dinamizarse". En ese sentido, ha puesto como ejemplo la estadística del desempleo, que en junio de 2015 sumaba 18.000 desempleados y ahora ha bajado hasta los 14.000. El saneamiento financiero ha permitido contener el gasto y racionalizar la gestión. La deuda viva se sitúa en 50 millones de euros, frente a los 115 millones de 2015. Los fondos de tesorería ascienden a 29 millones, cuando hace dos años era de 1,8 millones. Las facturas de proveedores se pagan en 37 días desde que se registran en el Ayuntamiento.

Al mismo tiempo, se han impulsado inversiones por un total de 30 millones de euros, entre las incluidas en el presupuesto municipal y las financiadas con fondos europeos. En 2018, el ritmo inversor continuará con una nueva fase de los proyectos Edusi, un centro para enfermos de Alzheimer, más dinero para presupuestos participativos, un plan de accesibilidad, la remodelación de nuevos edificios municipales (Borrull y Quatre Cantons) y, por primera vez, la adquisición de vivienda social municipal.

Marco ha destacado los beneficios de la segunda reforma fiscal emprendida por el Gobierno municipal, con la reducción de tipos del IBI y la reducción de los valores catastrales, la bajada de la contribución rústica y del ICIO, la creación del Consejo Municipal de Inspección. A pesar de eso, se potenciará el Pacto Local por el Empleo, que se incrementa un 75%, y aumenta el presupuesto de programas de empleo propios, como Jornals de Vila, y los subvencionados por la Generalitat. La emergencia social también se refuerza. La inversión por habitante será de 131 euros, frente a los 69 euros de 2015.

"Castellón es una ciudad de talento. Esa es nuestra fortaleza y ese es el resultado de los miles de talentos individuales que nos hacen fuerte en lo colectivo. El talento es la suma de las capacidades, del compromiso y de la acción", ha destacado. "El 8 de septiembre Castellón celebró el aniversario de su fundación. Castellón, 766 años después, sigue siendo futuro. Tenemos razones para el optimismo. Castellón es una tierra que siembra futuro. Y quien siembra futuro recogerá, necesariamente, prosperidad", ha concluido.